Bienvenido. Welcome. Bienvenu. Willkommen.

Que vivimos en tiempos furiosos. Que no nos toleramos a nosotros mismos ni por un segundo. Que nos han enjaretado las ineptitudes de nuestros padres. Que nuestras naciones parecen rellenos sanitarios.
En medio de todo, yo escribo. Me siento faro ante la tenebrosa noche. Me siento falo, derechito para el cielo. Ésta es mi vida, mi carro, mi escuela, mi casa, mi trabajo. Ésta es la huella que tú, por certeza o por pereza, has decidido también acoplar a tu paso.

martes, 3 de diciembre de 2013

Te veré en el desayuno?

la nuestra no es cuestión de amor, es cuestión de calor

descendiste de tu automóvil y lo supe
el paso felino de tu andar y se acomodó la certeza
tomó una sonrisa, la noche perfumada de tu pelo y lo que tarda un semáforo
para ya no poder ponerlo en duda

enfriamos las preocupaciones en un par de cervezas
y llegó la merienda para compartir
éramos dos hambres inquietas

cuando llegó la cuenta y con la situación ya más que tibia
le pagamos a la suerte sin mirar
no subiste sola a tu automóvil

zigzagueaste conmigo, entre la superficie y lo profundo
de las calles, de nuestras vidas
hasta que por fin, estacionaste en mi cuarto
intermitentes, los besos y el tacto
nos supimos en un jardín de muchos fuegos
con nuestras ropas floreciendo en el piso
desconocidos horas antes
cómplices con el instante

no, lo nuestro en ningún momento fue cuestión de amor

ahora,
con tu rostro apagándose en mi pecho
no puedo dejar de preguntarme

si te veré para el desayuno